Tarta de Queso – Receta Casera y Cremosa

Preparar la base Tritura las galletas hasta que queden como polvo (puedes hacerlo en una batidora o metiéndolas en una bolsa y aplastándolas con un rodillo).

Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta que obtengas una masa húmeda.

Coloca esta mezcla en la base de un molde desmontable (aproximadamente de 22-24 cm de diámetro) y presiona bien para que quede compacta.

Refrigera la base en la nevera mientras preparas el relleno.

Preparar el relleno de queso En un bol grande, bate el queso crema con el azúcar hasta que esté suave y sin grumos.

Añade los huevos, uno a uno, batiendo bien después de cada adición.

Incorpora la nata líquida y la esencia de vainilla y mezcla hasta obtener una mezcla homogénea.

Si deseas una tarta más firme, añade las dos cucharadas de harina de trigo y mezcla bien.

Hornear la tarta Precalienta el horno a 180°C (350°F).

Vierte la mezcla sobre la base de galleta que has preparado.

Hornea durante unos 50 minutos, hasta que la tarta esté firme en el centro (puedes comprobarlo introduciendo un palillo, debe salir limpio).

Si ves que se empieza a dorar demasiado, cubre la tarta con papel de aluminio durante los últimos minutos de cocción.

Enfriar y decorar Apaga el horno y deja enfriar la tarta dentro durante unos 30 minutos.

Luego, sáquela del horno y déjala enfriar completamente a temperatura ambiente. Después, refrigera la tarta al menos 4 horas o, mejor aún, toda la noche.

Antes de servir, puedes decorar con mermelada de frutas rojas, frutas frescas o incluso un poco de chocolate derretido.